Comienza la matanza de lobos sentenciados por la Viceconsejera de Medio Ambiente Belén Fernández

Lobo común, Imagen de archivo de dominio público -Wikimedia Commons-

La Consejera de Medio Ambiente se oculta tras la justificación de que la decisión se tomó en un comité vertical, es decir de esos montados a medida de la administración. El Comité en cuestión se llama Comité Consultivo del Plan de Gestión del Lobo en Asturias.
El Comité aprobó la drástica propuesta del Principado de eliminar 33 lobos cada año, una cifra que duplica el ya excesivo número de controles llevados a cabo en los años anteriores, aunque estos son sólo una parte ya que también caen muchos lobos por “accidentes”.
¿Quien compone este democrático pelotón de ejecución?
Pues por la Consejera de Medio Ambiente, que por supuesto ya que “parte y reparte” se queda con la presidencia. De vicepresidente del Comité está su mano derecha o izquierda (para no ser manófobos), es decir "quien ostente la titularidad de la Dirección General que tenga asignadas funciones en materia de conservación de la naturaleza". Como vocales están:
“Tres de entre empleados públicos de la Administración del Principado de Asturias, que presten sus servicios en la Consejería competente en materia de conservación de la naturaleza.”
“Dos en representación de la Federación Asturiana de Concejos.”
“Tres en representación de las Organizaciones Agrarias.”
“Uno en representación del Consejo Regional de la Caza.”
“Uno en representación de las Entidades Conservacionistas.”
“Uno en representación de la Universidad de Oviedo.”

Estando así las cosas es comprensible que la única voz discordante fuera la del representante de los grupos ecologistas. Aunque hay que recordar que sólo es uno en un comité con una amplia representación de miembros a sueldo de la administración. Todo atado y bien atado.
Datos del reglamento del Comité publicado en e 17–VII–2003 en el BOPA, Boletín Oficial del Principado de Asturias

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que horror. Lo de anestesiarlos para llevarlos a otros parques con falta de ellos o para castrarlos si es que hay muchos, ni se lo plantean

Anónimo dijo...

Nada como en tiempos de Franco a escopetazo

Archivos del Blog